José Montilla

El líder del PSC ha decidido "ir a trabajar" este viernes en metro. Rodeado de cámaras, periodistas, policías y miembros de su partido, Montilla ha acudido a la estación de Cornellá, donde ha adquirido su billete en las máquinas. Pero en el momento de introducirlo en el control de entrada, el político se ha equivocado de lado y se ha golpeado ante las cámaras. El abultado séquito que le acompañaba ha causado algunas quejas entre los viajeros, que lamentaban que iban "a llegar tarde". Otros, en cambio, han aprovechado para pasar sin pagar. La única persona que ha logrado aproximarse a él ha afirmado que le "temblaron las rodillas de emoción" en el encuentro.

El presidenciable del PSC afirmó este jueves que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no le pedirá que apoye a Mas para blindar la mayoría parlamentaria socialista en Madrid y reiteró que "no aspiramos a ser complemento" de CiU, "ni soy candidato para ser 'conseller en cap' de Mas". Montilla también cargó contra ERC por "no tener cultura de gobierno" y admitió que "respiraría tranquilo" si no necesitara a los republicanos para gobernar.

El presidente de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía, Albert Rivera, ha remarcado que su electorado "no votaría nunca al PP o al PSC porque está harto de que sus votos sirvan para constituir gobiernos nacionalistas". En un mitin en el barrio barcelonés de Sant Andreu, Rivera respondía así a Josep Piqué, que horas antes pedía a los simpatizantes de Ciudadanos que votasen el PP porque es la "única opción política en condiciones de defender" ideales políticos como los de la nueva formación. Para Rivera "Piqué está muy nervioso porque sabe que Ciutadans estará en el Parlamento y defenderá sin complejos lo que él nunca se ha atrevido: se puede ser catalán y no ser nacionalista".

El segundo día de campaña en Cataluña ha tenido como protagonistas a los empresarios del sector del cava, que aprovecharon una visita de José Montilla para expresar su "preocupación" ante posibles boicots en el futuro. "Que nadie grite contra España", han pedido los empresarios al líder del PSC, quien se ha limitado a decir que "será firme en la defensa de los intereses de Cataluña", algo que podría traer "tensiones". Mas, mientras, le ha preguntado a Montilla cómo va a gobernar la Generalidad si se pone "tan nervioso" en una entrevista, en alusión a la que concedió a La Vanguardia y que abandonó tras llamar "sectario" al periodista. Piqué confía en el "voto oculto".

La Vanguardia publica este lunes una tensa entrevista del economista catalán Xavier Sala i Martín al líder del PSC, José Montilla. El candidato socialista fue perdiendo los nervios a medida que avanzaba la charla hasta que explotó al final, y después de un primer amago de abandonar la entrevista se levantó indignado: "Mira, nos vamos, Toni. Adiós. Sectario, usted es un impresentable. Quiero una cinta de lo que he grabado, o una copia. ¡Eres un sectario! ¿Pero qué te crees? ¡Eres un sectario, lleno de prejuicios! ¿Pero tú que te has creído, tío? ¡Estés o no estés en Columbia!". El diario barcelonés no ha publicado este última parte de la entrevista, pero Sala i Martí ha colgado la trascripción íntegra en Internet.

La campaña electoral en Cataluña ha arrancado sin novedades, con los líderes de los partidos lanzándose reproches y con los intentos de los radicales por silenciar al PP. A la entrada del local en el que Piqué celebraba el acto de inicio de campaña, una cuarentena de jóvenes con banderas independentistas catalanas y republicanas gritaron consignas contra los populares, el Estado español y la policía nacional, a quien tildaban de "torturadora". El vídeo de CiU contra el tripartito ha centrado los discursos de socialistas y republicanos.

La candidatura encabezada por Artur Mas lograría el 21,4% de los votos en las elecciones catalanas si éstas se celebraran ahora y el PSC se situaría a 1,8 puntos con una intención de voto del 19,6%, según una encuesta del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalidad. La encuesta sitúa al PP por debajo del 5 por ciento, exactamente, con un 4,3 por ciento, aunque alerta de la importante bolsa de voto oculto de la formación popular.

El PP contra los sondeos. Los últimos le asignan un papel secundario, con una influencia dudosa o inexistente en la gobernabilidad de Cataluña. El de Sigma Dos para El Mundo detecta un retroceso hasta el 11% de los votos, lo que no le serviría de mucho en su sueño de formar gobierno con CiU. En Hospitalet, Mariano Rajoy ha insistido en la importancia de las elecciones del próximo 1-N para cambiar una Cataluña que "se ha convertido en el reino del silencio y la complicidad, donde no se discuten los problemas sino que, sencillamente, se tapan". José Piqué, el candidato, ha culpado al Tripartito por una Cataluña de "la confrontación y el resentimiento que odia a España".

El portavoz del PPC ha enmarcado la agresión a Acebes y Pique en una campaña en la que, "durante mucho tiempo", todas las fuerzas políticas, "incluyendo obviamente al PSC, se han dedicado a satanizar al PP, haciéndonos parecer como algo muy perjudicial para los intereses de Cataluña". Lo último, ha denunciado en la Cope Daniel Sirera,  es que haya algunos medios de comunicación que ahora se están dedicando "a convertir a las víctimas en verdugos". "Es una auténtica vergüenza, muy propio de la izquierda", ha apuntado.