No es extraño que en la página especializada HotelChatter se hayan quedado de piedra ante la última propuesta londinense: el "lujo cutre" (me parece que es la traducción más acertada de "rough luxury", que literalmente sería "lujo áspero") y que es la imagen que vende el Rough Luxe Hotel, situado en la zona de la capital inglesa en la que están los hostales baratos y que se define a sí mismo como "mitad lujo, mitad cutre. Un poco de lujo en una parte cutre de Londres. Una porción de cutrez en el Londres más lujoso".

La verdad es que la decoración lujoso - cutre me parece tan detestable como cualquier otra de esas que se esfuerza tanto en hacerse presente ante mis ojos, pero podría pasar por ahí siempre que la cama y la ducha estén limpias. Ahora sí, pagar 135 libras la noche por una habitación (casi 160 eurazos) por una habitación con el baño compartido, eso sí que no.

Lo más curioso es que el hotel no es una chorrada aislada (dicho sea con todo el respeto) sino parte de todo un concepto y una cadena que incluye el propio hotel, restaurantes, librerías y espacios para eventos.

En fin, como decían nuestras abuelas: ya no saben qué inventar.