Hay una estación maldita en el Metro de Barcelona, la Estación Rocafort. Una estación que desde su construcción está marcada por la tragedia y la muerte. Durante las obras hubo un derrumbe que le costó la vida a numerosos trabajadores. Posteriormente, durante la Guerra Civil sirvió como refugio, lo que hizo que muchos murieran en el lugar. Varios suicidios en la década de los 60 comenzó a alimentar la leyenda, muchos viajeros y trabajadores contaban que pasaban cosas raras en sus pasillos e incluso que veían presencias.
Muchas de esas leyendas han servido a Luis Prieto, un director del cine que ha desarrollado buena parte de su carrera en Hollywood, como inspiración en Estación Rocafort, película de miedo que llega este fin de semana a las salas de toda España. La película comienza con un asesino que ha raptado a una familia y los ha llevado hasta las vías de la Estación Rocafort. La Policía no puede impedir la tragedia.
Años después volvemos a las profundidades del Metro de Barcelona, Laura (Natalia Azahara) es una joven que empieza a trabajar en la empresa pública de la ciudad Condal y le toca como primer destino el que no quiere ningún trabajador, la Estación Rocafort, y además en el turno de noche. Sugestionada por su compañeros, que empiezan a contarle cosas que ocurrieron, la joven empieza a experimentar una serie de vivencias terroríficas.
Decidida a descubrir que hay detrás de lo que le está ocurriendo, contacta con Román (Javier Gutiérrez), el policía que años antes no pudo evitar la muerte de la familia a manos de un asesino y que vive atormentado por sus propios demonios desde entonces. Pronto lo que se encontraba allí escondido empezará a acechar a Laura y a todos los que la rodean.
Luis Prieto sabe resolver de forma muy efectiva una historia que busca crear terror en el espectador. El director crea una atmósfera muy propicia para ello, con mención especial del ruido que provocan los trenes en los túneles. También es destacable la interpretación de su reparto, al siempre efectivo Javier Gutiérrez se le une Natalia Azahara, joven promesa del cine español llamada a convertirse en una estrella.