Chile 1962

Después de doce años, la Copa del Mundo volvió a Suramérica. Chile fue el país elegido para organizar el séptimo Mundial de Fútbol, a pesar del miedo de más de uno de los organizadores por la pobre infraestructura que podría ofrecer. Pese a que al principio hubo algunos problemas, todo terminó marchando sobre ruedas. Brasil, el campeón, partía como favorito, pero en ningún momento llegó a demostrar la fama que lo precedía. Pelé, su máxima estrella, se quedó al margen del campeonato después de sufrir una distensión muscular en el primer partido. Salvo Checoslovaquia, que le empató en la ronda previa, ninguna otra selección pudo hacerle frente.

Los "auriverdes", comandados por Didí, Garrincha y Djalma Santos, derrotaron en la semifinal al equipo local y llegaron a la final para enfrentar nuevamente a Checoslovaquia. Esta finalísima fue el primer partido televisado en directo internacionalmente, aunque la señal llegó a pocos países. Como le había sucedido cuatro años antes en Suecia, el equipo brasileño comenzó perdiendo. Pero llegó a empatar rápidamente y después sacó una tranquilizadora ventaja de dos goles. El 3-1 final volvió a darle la Copa Jules Rimet, y de esa forma se insertó en el selecto grupo que la había obtenido dos veces, acompañados por Uruguay e Italia. Los locales tuvieron una destacada participación, logrando el tercer puesto tras caer derrotados en la semifinal frente a Brasil por 4-2 y ganar el último partido a los yugoslavos.

Los chilenos participaron, además, de uno de los partidos más tristes de ese mundial: una batalla campal contra los italianos que terminó con dos jugadores europeos expulsados, uno de ellos con la nariz fracturada. Otro partido para recordar fue el jugado por colombianos y soviéticos. En el arco de los europeos estaba Lev Yashin, la "Araña Negra", considerado el mejor arquero de todos los tiempos. La URSS se puso en ventaja y marcó amplias diferencias en el primer tiempo, que terminó con una tranquila victoria de 4-1. Después del descanso, los colombianos reaccionaron. Lentamente fueron acercando peligro al área de Yashin. Uno tras otro fueron llegando los goles, y el partido terminó empatado 4-4.