
Llamado
a conducir la selección polaca después de la destitución de Janusz
Wojcik, Jerzy Engel logró literalmente resucitar al equipo que ostenta
con orgullo el águila en el pecho, para auparla, a partir de septiembre
2001, entre los clasificados directos del Mundial 2002.
A partir de su toma de funciones, el 1 de enero 2000, el que tiene como sobrenombre "Jurek", impuso un sistema de juego defensivo que le permitió al equipo no someterse al juego del adversario. A tal punto que los polacos sólo perdieron 1-0 frente a los campeones del mundo franceses en la primavera de 2001.
Eran muy pocos, en Polonia, los que pensaban que se le podía dar una oportunidad a este ex mediocampista del Polonia Varsovia, que interrumpió su carrera a los 22 años como consecuencia de una lesión, y cuyo palmarés como entrenador se resumía a un segundo lugar del Campeonato de Polonia en 1996, como director deportivo del Legia de Varsovia, y luego, desde 1999, como entrenador del Polonia Varsovia.
Incluso en Chipre, en donde dirigió durante siete años en varios clubes, como el Apollon Limassol, ningún título o Copa aumentaron su palmarés